Es el momento de presentar a un buen amigo: Mr. Phuoc. Un grande de Vietnam, hombre entrañable y enamorado de España que se dedica al extendido oficio de Xe Om, es decir, moto-taxi.
Mr. Phuoc se levanta cada día a las 4 de la madrugada para ir al mercado y comprar verdura para un pequeño puesto de Van Kiep. Luego trabaja todo el día como Xe Om, y cuando tiene un minuto, nos llama 250 veces para invitarnos a Ca phe sua Da en su casa. La pequeña comunidad española acude de vez en cuando a su llamada y siempre nos espera con alguna delicia de la cocina viet. La última este sábado, bebimos, comimos, cantamos y celebramos quién sabe qué, pero fue un placer.
3 comentarios:
Te miro igual que las zapatillas, con envidia, desde lo alto, viendo cómo se te va tatuando la piel de momentos imposibles, de esos momentos que nacen ya con la nostaligia de un futuro sin ellos.
Pero a parte de toda esta verborrea me faltan datos, concretamente de la muchacha de la derecha.
No sé qué mas decirte salvo que la compañía es inmejorable, mi estimado.
Tú lo has dicho, caímos como perros, caímos como fuera, pero caímos. La Champions se aleja, la UEFA antes parecía un mal menor, ahora, una madera que zimbrea bajo los pies... Ojalá estuvieras aqui y pudiera llevarte al Calderón para que empujaras a nuestro Atleti con tu garganta... en directo... Me encantan tus historias desde allá, creo palparlas desde acá, desde Madrid
yo paso de escribir tanta palabreja que soy de ciencias, y te pregunto directamente, quien es el del taxi, el de tu izquierda o la de tu derecha.
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